«Al niño hay que darle mucho cariño y nunca castigarlo.«
Pocos conocen a Clemencia Idolina Parra, viuda de Azuaje, pero todos los que han pasado por las Aulas del Jaime Cazorla, conoce como la palma de la mano a la maestra Idolina, un ejemplo, un valor, un blasón de esta escuela que este año celebró su centenario, y bale recordar en estos momentos a sus viejos docentes, como ejemplo para las nuevas generaciones.
Ella -la maestra Idolina- Formó parte de una generación de familia educadora, y supo seguir los lineamientos de sus tios, el maestro Guillermo Gamarra Marrero y la recordada «Niña» Ana.
Vale recordar también aquella época en la cual los niños de mala conducta eran rechazados por maestros que buscaban en el Aula la tranquilidad y la concentración. Sin embargo, nuestra querida maestra nunca los rechazó, y le decía a los directores «Tráiganmelos que aquí vamos a ver que hacemos con el niño.» y es así que esta noble educadora prácticamente se transformó en una especie de lo que hoy llaman «El Psicoterapeuta» que analizaba la condición del menor y diagnosticaba su caso.
¿Y que recuerda de esos niños? Le preguntamos, nos dice «Yo recuerdo que había un niño que le daba golpes a la pared hasta hincharse los dedos.» «¿Que le pasa?» le preguntaba, y respondía «Es que tengo mucha rabia maestra, por eso lo pego a la pared.» «No hijo, eso no se hace, eso esta mal hecho» y los sentaba en el primer puesto a mi lado, así los fuí llevando hasta que a la vuelta d e una semanas, los padres se sorprendieron de que era ya un niño obediente y normal en el mejor sentido de la palabra. Había también una niña que vive cerca de mi casa, que lanzaba al piso libros y cuadernos, sus compañeros le recogían el material, pero yo les dije «Dejen que ella los recoja nuevamente» Y así fue hasta que la niña de la noche a la mañana se había normalizado, sus padres también me agradecieron este trabajo. Pero esto ocurre porque el arma que uno dispone es el cariño y los buenos consejos y nunca debe castigarse al niño, si no premiarlos por cualquier acto positivo. Mi aula aveces llegaba a los 50 Alumnos y sabían lo que era un buen trato, pero yo también entendía que era una experiencia de 42 Años en educación desde su inicio en guayabital en el año 1958 hasta el año 2000, cuando le llego su jubilación.
Actualmente la maestra Idolina se encuentra en estado físico y mental extraordinario, casi al llegar a su centenario de edad, en la mañana riega su jardín de la casa y cuida, con mucho amor sus gatitos, dios le de vida hasta el infinito.
Estimados senores
Soy Luis Valera Carmona, vivi en Biscucuy hasta los 18 anos cuando me fui a la ULA pero seguí visitando mi familia Carmona hasta que emigre a España en 2005
Felicitaciones por este periodico, tengo noticias de mi pueblo y especialmente me gusta por las referencias que se hacen a las personas ilustres de épocas pasadas del pueblo, como es el caso del reportaje dedicado a mi querida maestra Idolina
Por favor pudieran ustedes facilitarme el telefono o correo electrónico de mi maestra Idolina?
My email es: luisvalera2@yahoo.com
Un saludo cordial