La dirigente nacional de Primero Justicia, presidenta del partido, ha escalado nuevamente posiciones de relevancia tras adversidades injustas como aspirante a la gobernación de portuguesa. Se recuerda que su participación la hizo en momentos en que el chavismo arrasaba en todo el país, y aquí en portuguesa, era la primera fuerza política, amén del trauma del abstencionismo y la frustración por los partidos políticos tradicionales. No logró sus objetivos, pero dejó la huella de haber conformado la estructura política del partido amarillo, detrás del chavismo, Acción democrática y Copei.
Este cuadro político la justificaba para mantenerse en la dirección nacional del partido. Después sería designada presidenta de esta organización política, todo por su constancia y su trabajo desempeñado en momentos en que había dejado de ejercer el derecho como una profesional exitosa y laborar en el campo en diversas áreas productivas. Ya consolidada políticamente, había mantenido una amistad sincera con María Corina Machado, cuando esta no estaba en las escalas de la popularidad. Actualmente trabaja en la intensa campaña presidencial.
Su relación con María Oropeza.
Su trabajo político, no descuida a su región, y mantiene una relación permanente con la líder portugueseña, María Oropeza. La experiencia de María Beatriz la ha puesto a su servicio sin mezquindades. Es una pareja de futuro para lograr un cambio inevitable en Portuguesa, que no se obtiene desde finales de la década de los años 90’s, donde impera el chavismo absolutista y corrupto, con líderes jefaturales que desaparecen de la noche a la mañana. Por ello, podría estar en estas dos lideresas portugueseñas, María Beatriz Martínez y María Oropeza.