-Por Leonardo Arriaga
Los llamados «Comanditos», que no son otra cosa que grupos de familias o vecinos que se reúnen para impulsar las políticas proselitistas de la líder nacional María Corina Machado, están al tanto de los problemas de la comunidad y tienen su razón de ser. Sin embargo, esta actividad les ha valido ser objeto de persecución, e incluso de calificativos delictuales y difamatorios, hasta el punto de enfrentar detenciones sin causa aparente. Parece que esa es la orden actual. Esperemos que la situación no empeore, ya que estas familias humildes solo buscan ser protagonistas de un proceso de cambio en el que todos participamos.